Previamente a presentar cualquier intervención a nuestros clientes nos aseguramos de que el diseño propuesto y la imagen fotorrealista que le enviamos se puede ejecutar.
Esto quiere decir que previamente hemos tenido en consideración cuáles son las condiciones de la zona a intervenir, cuáles son las zonas con mayor exposición solar, las más sombradas, qué tipo de clima tenemos en la zona, etc.
De forma que las plantas, ubicación de las mismas y organización del espacio está completamente pensado en consonancia con los requerimientos de cada jardín.
La realización de estudios solares, climáticos y topográficos nos proporciona información básica a la hora de crear un espacio verde por lo que son procesos que siempre van incluidos en nuestros proyectos.
Además, la base imprescindible de un buen jardín es un suelo con características óptimas para el correcto crecimiento de las plantas y un sistema de riego adecuado para cada tipo de plantación por lo que realizamos estudios de la calidad del suelo y del agua en la parcela, de forma que podamos realizar nuestros proyectos con la mayor información posible y las soluciones adoptadas sean las mejores.
Los estudios preliminares del entorno pueden incluir:
Estudio solar
Estudio climático
Estudio de la calidad del agua
Estudio de la calidad del suelo
Levantamiento topográfico